El duelo patológico, también conocido como duelo complicado o prolongado, se caracteriza por una intensa y persistente dificultad para adaptarse a la pérdida de un ser querido. Las personas pueden experimentar síntomas similares a los del duelo normal, como tristeza, desesperación y sensación de vacío, pero de manera más intensa y prolongada. La terapia se centra en ayudar a las personas a procesar su pérdida de manera saludable y encontrar formas de seguir adelante con sus vidas.

Síntomas:

Los síntomas pueden incluir tristeza profunda, anhelo intenso por la persona fallecida, sentimientos de culpa o remordimiento, dificultades para aceptar la pérdida, cambios en el apetito o el sueño, entre otros.

Signos de alarma:

  • Síntomas de duelo intensos y persistentes que interfieren significativamente en el funcionamiento diario.
  • Dificultades para realizar actividades cotidianas debido a la intensidad del dolor.
  • Aislamiento social y falta de interés en actividades previamente placenteras.
  • Pensamientos recurrentes de muerte o suicidio.